Nur recibe un regalo sorpresa. Su aitite le ha construido una casita en la selva, en el jardín y, a su lado, un gran círculo dibujado sobre el suelo que marca los cuatro puntos cardinales, una rosa de los vientos. Su descubrimiento y su gran imaginación les conducirá, a Nur y a sus amigos, a correr una aventura hasta tierras lejanas: el Polo Norte.