En abril de 1993 la goleta Pitcairn se hunde en aguas de Ibiza con toda su dotación a bordo. Entre los tripulantes fallecidos se encuentra Álvaro Durán, un biólogo marino que deja esposa y dos hijos. Han pasado más de veinte años y Marcos, el mayor de los huérfanos, se enfrenta ahora a una nueva tragedia: la muerte de su madre. Enferma terminal, las últimas palabras de la viuda antes de morir son desconcertantes: «Tu padre sigue vivo». A partir de tan sorprendente revelación, Marcos inicia un peligroso viaje existencial que cambiará su vida para siempre. Buscar la Pitcairn será su meta; descubrir dónde se encuentra su padre le llevará a cruzar el Mediterráneo en un velero donde nada ni nadie es lo que parece. Se trata de una novela de aventuras que se desarrolla en un entorno marítimo, aunque también aparecen ciudades como Sevilla, Melilla, Madrid, Barcelona, Tánger o Marsella. La historia narra dos viajes en barco en dos momentos temporales diferentes, que acabarán convergiendo, uno en el año 1993, narrado en primera persona y a bordo de una goleta, donde parece que muriera el padre del protagonista, y otro en la actualidad, en un velero, narrado en tercera persona, desde el punto de vista de Marcos, el principal personaje de la obra.