Beber preparados de plantas es fundamental para mejorar nuestra salud, tanto directa como indirectamente. Nos ayuda a conectar con nuestro entorno inmediato y con el universo, nos ofrece enraizamiento y un propósito vital. La influencia de la botánica se puede observar en todos los aspectos de la vida, ya sea en la cocina, en las tiendas del barrio, en los bares o en el mundo de la moda, e incluso en los envoltorios. Todo está hecho con plantas: el vermut, el dentífrico, el perfume, el té, o los medicamentos en los que confiamos, por poner solo algunos ejemplos.
Muchos de los métodos y fórmulas antiguos son más interesantes que algunos de los que se utilizan en la actualidad, así que, en este libro, se arroja nueva luz sobre algunos de los viejos métodos y se abre un portal a través del cual reintroducir y revivir las recetas ancestrales.