Las “sagas”, obras en prosa de carácter histórico, constituyen un género literario peculiar de la Islandia de los siglos XIII al XV y en ellas se narra la vida de sus más célebres personajes y héroes tradicionales. Tal es el caso de Egil Skallagrimsson (siglo X), prototipo del vikingo clásico (“un guerrero, un conspirador, un caudillo, un pirata y un hechicero”, en palabras de Borges, apasionado divulgador de esta saga en lengua española), cuyas numerosas expediciones victoriosas le proporcionaron fama y riquezas, además de ganarse un puesto preeminente en la historia de la literatura universal como excelso poeta, sin duda el más grande de los escaldas escandinavos.
La Saga de Egil Skallagrimsson es, por su extensión y calidad, una de las principales sagas islandesas, y en sus páginas quedan reflejadas las dos facetas fundamentales de su héroe protagonista: la vida del guerrero y la del poeta, pues al hilo de la narración se incluyen todos los poemas que de él se conservan. Probablemente fue redactada hacia el año 1230 por el escritor y político islandés Snorri Sturluson (1179–1241), personaje asimismo fundamental en la historia islandesa y su más ilustre literato medieval, de quien en esta misma colección se han editado sus Textos Mitológicos de las Eddas, también traducida y prologadas por Enrique Bernárdez, y La Saga de los Ynglingos, traducida y prologada por Santiago Ibáñez Lluch.