No pocas veces se ha descrito a Shakespeare como el escritor más famoso del mundo y el más grande poeta y dramaturgo de todos los tiempos. Y sin embargo un aura de misterio ha rodeado siempre su figura y su obra.
Este libro está lleno de palabras de amor: todo tipo de palabras de amor y palabras de todo tipo de amor. La maravilla del amor correspondido, la tragedia del amor imposible, el insoportable rechazo, la cruel traición, los celos que consumen, la locura del amor que cree poder con todo. Y es que hay tantos, tantos tipos de amores? Hay amores grandes y diminutos, enormes y frágiles, ásperos, terribles y dulces; hay amores tiernos y obscenos, ridículos y sofisticados; hay amores llenos de aristas, amores recónditos y amores que vuelan; hay amores elegantes y armoniosos y hay amores repulsivos y grotescos; amores tortuosos, insensatos, impacientes y amores brillantes, originales y lúcidos; repentinos y lentos, condenados y puros; amores que redimen y amores que matan. Pero todos, todos? están llenos de palabras. ¿Pues cómo podríamos amar sin palabras, seducir sin palabras? El enamorado o suspira o habla. Y cuando habla, habla de su amor y, si puede, le habla a su amor y, cuando puede, rebosante de palabras, seduce a su amor.
¿Seducir para enamorar o enamorar para seducir? A veces amar puede ser la mejor forma de seducir, sobre todo porque el enamorado nunca se queda sin palabras. Feliz aquel que encuentra siempre las oportunas. Y para los otros, los que se enredan con ellas cuando más las necesitan, los que no encuentran las justas, ahí va este libro que puede inspirarlos, estas palabras de amor de Shakespeare.