«Una voz llega a alguien en la oscuridad.» Este alguien yace boca arriba en la oscuridad, escuchando la voz que se dirige a él, a veces débilmente desde lejos, otras un murmullo al oído, la voz es «compañía»: la mente nunca cesa de hablar, recordar, sugerir, preguntar o, simplemente, repetir alguna frase lúdica como una aguja atascada en el surco de un disco... "Compañía" es el texto más importante y más extenso, pese a su brevedad que Beckett escribió en sus últimos años. Como escribió Aldo Tagliaferri: «La especial densidad que lo caracteriza procede de su naturaleza paradigmática, puesto que en él reencontramos temas y tonos propios de obras anteriores. Su estructura, formada por varios segmentos de variable longitud y separados por una pausa, permite calculadas traslaciones de la anécdota parabiográfica a la reflexión, del tono lírico al argumentativo, del estilema que nos recuerda los primeros pasajes narrativos beckettianos al que recuerda los últimos.» "Compañía" es un paso adelante en la exploración de lo finalmente inexplorable, en la odisea del autor descendiendo a los abismos de la imaginación creadora. Aunque, como siempre, Beckett ilumina sus propias tinieblas con austera hilaridad.