El cuerpo siempre ha sido importante en la Historia del arte, pero es en la escultura donde adquiere mayor relevancia. En el presente libro, Tom Flynn se centra en el cuerpo como preocupación básica de los escultores desde la Prehistoria hasta nuestros días, examinando el modo en que ha sido utilizado por el hombre para expresar sus aspiraciones, miedos y ansiedades, desde el mito de Pigmalión hasta las modernas performances en torno al sida. La obra va acompañada de una abundante documentación gráfica, que incluye objetos considerados habitualmente marginales, como figuras de cera, autómatas o muñecas.