Alejandro Dolina se ha convertido en uno de los escritores más leídos de América con estos relatos sobre las prisas de nuestro tiempo, sobre los dramas banales de nuestras vidas, sobre las dificultades de comunicación y, en definitiva, sobre el amor.
El hombre a quien llaman en Narrador de Historias está obligado a contar un cuento cada noche, cuando el reloj da las doce. Nadie le presta atención. Pero el Narrador es también el personaje de una conspiración para salir del bar, o quizá sea del tiempo.