Cualquier conocedor de Shakespeare se preguntará qué hacen dos personajes como Lady Macbeth y el rey Lear en medio de la estepa rusa del siglo XIX, y de qué manera habrán logrado Leskov y Turguéniev integrarlos en un escenario aparentemente ajeno a ellos y al contexto en el que estamos acostumbrados a verlos.
Pues es bien sencillo: el amor, los celos, el deseo, la ambición desmedida, el honor, la traición... son los conceptos universales que sustentan estas dos historias, sea cual sea el lugar y el tiempo en el que se desarrollen. Las pasiones que atormentan al ser humano son las mismas en los castillos de la Inglaterra medieval y en las haciendas de la Rusia rural prerrevolucionaria.
Los espléndidos relatos de Leskov y Turguéniev, dos escritores muy distintos tanto en su forma de ver la vida como en su prosa, son buena muestra de ello.