Violetta, la protagonista de Diablo Guardián, es una joven de quince años que huye de México a Estados Unidos con dinero que ha robado a sus padres.
Novela ganadora del Premio Alfaguara de novela de 2003, por el autor de Puedo explicarlo todo y La edad de la punzada.
Violetta tiene quince años cuando cruza la frontera con más de cien mil dólares robados a sus padres, asimismo excelentes amigos de lo ajeno. Azarosamente desembarcada en Nueva York, sobrevive durante cuatro años a todo tren, gastando varios kilogramos del dinero mal habido.
Para mantener ese ritmo, acelerado todavía más por el polvo blanco que introduce por su nariz en cantidades generosas, se enseña a enganchar hombres en lobbies de hoteles lujosos. No sabe, ni le interesa, la cantidad de leyes, límites y preceptos a los que pasa por encima. Tampoco sabe que Nefastófeles, el supuesto rico heredero que la deslumbra, será como una daga clavada en su bella espalda hasta que, ya de vuelta en México, se tope con Pig, y llegue entonces la hora del Diablo Guardián.
Pero lo que Violetta sí sabe es que es tiempo de arrojar los dados y cerrar los ojos, casi con ganas de que a todo se lo lleve el diablo; y que, generalmente, eso lo haces solo cuando de plano crees que ya te va a llevar.