Barry Lyndon, primera novela de Thackeray, es una obra maestra del siglo XIX inglés en la que se narra el ascenso y caída de una ambición desmesurada.
«En la sencillez residía nuestro secreto: todo lo que triunfa en la vida es sencillo.»
Redmond Barry, un joven irlandés, está decidido a convertirse en un hombre rico e importante. Se alista en el ejército británico y participa en la guerra de los Siete Años. Pronto deserta y se pasa al ejército prusiano, donde se convierte en espía. Más tarde conoce a un caballero que le adiestra en el arte de la estafa, y juntos despluman a todos los aristócratas de las cortes europeas. Barry, hipócrita, trepa y vanidoso, usa todos sus ardides para escalar en el mundo social del siglo XVIII, hasta alcanzar un punto álgido al casarse con lady Lyndon, la joven viuda de un acaudalado conde. Es entonces cuando descubrirá que, tras subir la montaña, solo queda bajarla.
Thackeray, maestro de la ironía y la psicología, creó en esta novela uno de los personajes más fascinantes de la historia de la literatura, que ahora, gracias a la espléndida traducción de Ana Nuño, cobra una nueva vida.
Charlotte Brontë dijo...
«Cuanto más leo la obra de Thackeray, más convencida estoy de su singularidad: es único en su sagacidad, único en su veracidad, único en su sensibilidad... Thackeray es un titán.»
Charlotte Brontë dijo...
«Cuanto más leo la obra de Thackeray, más convencida estoy de su singularidad: es único en su sagacidad, único en su veracidad, único en su sensibilidad... Thackeray es un titán.»