Acompañado de Heiji, que ha venido desde Osaka para participar en un programa de televisión llamado "el Koshien de los detectives", Conan resuelve el misterio de un asesinato en una habitación cerrada.
De vuelta en Tokio, Conan y los jóvenes detectives le enfrentan a un caso de agresión justo después de un partido de fútbol. Gracias a la ayuda de sus compañeros, Genta escapa de una situación problemática.
Más adelante, Ran sospecha que su madre, Eri, tiene un amante, pero Conan le hace ver cuál es esa realidad.