Los detectives infantiles han conseguido solucionar el caso de la Copa del Emperador, pero para el pequeño Conan no hay descanso. Sonoko ha invitado a Ran a asistir a una reunión de aficionados a la magia en un chalet de montaña, y Mouri y Conan se ofrecen a acompañarlas en coche. Los asistentes a la reunión, incluida Sonoko, pertenecen a un foro de magia en internet y jamás se han visto antes.
De hecho, la pobre Sonoko se lleva un chasco cuando descubre que Rik Donald, el chico del foro que le gusta, físicamente no tiene nada que ver con lo que ella había imaginado. Lo que ninguno de ellos sabe es que su webmaster ha aparecido muerto en su casa. Cuando Conan y Mouri, de regreso a casa, lo oyen en la radio del coche, intentan volver, pero sólo Conan consigue cruzar el puento colgante, el único camino al chalet. Al llegar a la casa descubre que el asesino está entre ellos.