Heiji y Kazuha deciden quedarse en casa de los Mouri tras su breve secuestro, y durante su estancia en Tokio se ven envueltos en un caso que hace meses que tiene en jaque a la policía: un pirómano está incendiando edificios en la ciudad dejando como única pista la figura de un caballo rojo en el lugar del crimen.
El pirómano para tener como objetivo llamar la atención de alguien del departamento de policía, y para ello no duda en incendiar la casa de una mujer con la que Heiji y Mouri tenían una cita. ¿Se trata realmente de incendios aleatorios o tienen un objetivo?