Un impactante libro de imágenes en el que dos voces diferentes, un niño y una ardilla, van relatando su experiencia en el transcurso de un día cualquiera: «No todos los días puedes ver salir el sol. No todos los días terminas al pie de una colina... o en la cima de una montaña. A veces te sientes como un gigante (...), otras, gigantes te rodean».
Sin embargo, un día cualquiera también puede ser un día extraordinario y estar lleno de sorpresas. En Días como este, vemos a través de los ojos de dos protagonistas muy distintos —a los que aún no conocemos ni se conocen—, un mismo momento.
Cada voz ofrece una perspectiva diferente de lo que observa a su alrededor: los picos y los valles de la vida cotidiana, que son los mismos y, sin embargo, no lo son. Porque todo, desde el más mínimo detalle o el momento más fugaz, se puede ver desde muchos ángulos.
Las espléndidas ilustraciones de Alice Gravier, al igual que en su anterior libro, La casa en el bosque (Libros del Zorro Rojo, 2019), conducen nuestra mirada a través de un mismo paisaje que refleja dos mundos, dos escalas, dos perspectivas, que invitan al lector a ponerse en el lugar de otro: jugar a ver el mundo con los ojos de alguien más pequeño.