«Todo lo concerniente a los celtas se encuentra revestido de una atmósfera irreal e irracional en todo lo conforme a la
conciencia antihistórica de este pueblo. Los celtas han entrado
en la historia por la puerta de la leyenda en una época en que
Grecia y Roma tenían ya una historia»
Jean Markale
A lo largo de los siglos, la rica y vasta cultura celta se ha ido elaborando en el imaginario occidental a partir de ciertos estereotipos que no corresponden con lo que hoy sabemos. Se suele olvidar la complejidad de su sabiduría y la totalidad de sus expresiones plásticas, se da mucho más valor a los aspectos relacionados con la magia, los rituales o la simbología. Parece mentira que aún muchos creamos que se trataba de un pueblo de personas altas y rubias, cuando en realidad eran muy poco homogéneos desde un punto de vista étnico, o que los vinculemos con pócimas y hechizos en vez de valorar la calidad y belleza de su arte o su saber astronómico y científico.
En la diversidad de sus conocimientos, lograron forjar una civilización, aunque no un imperio, que predominó en la mayor parte del Viejo Continente durante todo el primer milenio antes de Cristo. Pero si esto aún no os convence de su importancia, pensad que algo tendría este pueblo de especial para que los romanos los consideraran «bárbaros escogidos» y pensaran que sus druidas eran depositarios de los saberes pitagóricos.
Gracias a grandes expertos, y bajo la coordinación de Gonzalo Ruiz Zapatero, esta lectura es una ayuda para aquellos que se interesen en la verdad de la historia íntima celta, su cultura y tradiciones.
«La verdad se robustece con la investigación y la dilación;
la falsedad, con el apresuramiento y la incertidumbre»
Tácito