A Jodie le encanta visitar la granja de sus abuelos. Vale, no es el lugar más divertido del mundo, pero su abuelo cuenta unas historias de terror fantásticas. Y las galletas de chocolate de la abuela son las mejores. Pero este verano, la granja ha cambiado. Los campos de maíz están secos. Sus abuelos parecen agotados. Y el único espantapájaros que había antes ha sido sustituido por doce espantapájaros muy siniestros. Entonces, una noche Jodie ve algo realmente extraño. El espantapájaros parece moverse, retorciéndose en su poste, cobrando vida...